(Y de fondo: The Man Who Sold The World, de Nirvana... No sé qué tiene últimamente esta canción que hace que me encante...)

We passed upon the stairs, we spoke of was and when
Although I wasn't there, he said I was his friend
Which came as some surprise I spoke into his eyes
I thought you died alone, a long long time ago

Oh no, not me
I never lost control
You're face to face
With The Man Who Sold The World

I laughed and shook his hand, and made my way back home
I searched for form and land, for years and years I roamed
I gazed a gazely stare at all the millions here
I must have died alone, a long long time ago

Who knows? not me
We never lost control
You're face to face
With the Man who Sold the World

Pues nada, que estoy aquí simplemente echando un pequeño ratillo antes de acostarme, que me he fijado y hace ya cinco días que no dejo nada aquí... ��Cómo lo hago?! Es que soy la peste, la peste pestosa... Ayer, cuando volvía de casa de mi alumna Laura, decidí ir a la biblioteca, pero camino de allí me quedé un rato en los jardines del Prado de San Sebastián. No había nadie, sólo alguna pareja en un banco, y algún hombre paseando a su perro. Pero no sé, me gustó. Me gustó esa sensación de tener delante de mí todo un jardín vacío, sólo lleno de charcos de la lluvia que había estado cayendo solo un par de horas antes. Saqué mi libro y me puse a leer. Me encanta leer en la calle. Más de una vez me he llevado mi libro a cualquier sitio, y me he puesto a leerlo allí, en la calle, en un parque o en una plaza. Y eso fue una de las cosas que me gustaron de ayer. Además, me encanta pararme a ver cómo la gente va y viene, sola, en pareja, en grupo, hablando, cantando, en silencio... Me encanta poder quedarme viendo muchas caras y fantasear sobre lo que hace cada persona, lo que la ha llevado a pasar justo a mi lado, ese día y a esa hora... Me parece fascinante. Finalmente, no fui a la biblioteca. Estuve un rato allí parado, sentado, y finalmente me volví a mi casa. Y, lo mismo que hay gente a la que le gusta quedarse en los andenes de tren simplemente esperando, a mí me gusta quedarme parado, viendo como decenas de vidas pasan por delante de mis ojos, esperando quizá a que alguien especial se me cruce, deseando que algún día se siente en mi mismo banco, para leer su libro...

(Y de fondo: Mother Earth, de Within Temptation...)

Pensar en la muerte con tranquilidad sólo tiene valor si lo hacemos en solitario.La muerte en compañia no es la muerte, ni siquiera para los incredulos, porque lo que mas duele no es dejar la vida, sino abandonar lo que le da sentido.

Ayer, fuimos a una charla sobre jóvenes y política. Fue genial. En el rectorado, una charla a cargo de Luis García Montero, su esposa Almudena Grandes y el gran Joaquinito, entre otros. El tema era Jóvenes y política. Evidentemente, viendo el plan de los contertulios y sabiendo que la charla estaba patrocinada por el diario El País, no cabía pensar que la charla pudiese tener un tinte derechista. A mí, la verdad, me gustó mucho. El mejor fue Luis Gª Montero. Joaquín Sabina, un gran payaso pero cuando se paraba y se ponía serio, soltaba cosas muy interesantes. Almudena, bien también, aunque soltó algún pegote que otro (porque los intelectuales como nosotros...). Al llegar, menos mal que la hermana de Mer ya estaba allí guardándonos cola, que eso estaba a reventar. Conseguimos entrar sin problemas, pero muchos compañeros se quedaron fuera. Empezó la charla. Estaban todos menos Almudena, que tenía el vuelo retrasado y no había llegado a tiempo. Comenzó la charla con un pequeño monólogo de Luis, que fue interrumpido por los propios estudiantes que se quedaron fuera y que no consiguieron entrar. No pararon de pegar golpes en la puerta, pidiendo que les dejaran entrar. Finalmente, entraron todos, colocándose por toda la sala, de pie y sentados en el suelo. Fue un bonito gesto. Una masa de personas enfurecidas porque personas a las que admiran están dando una conferencia a las que no se les ha permitido entrar, deseosas de poder compartir con los afortunados que estaban sentados sobre sillones de fieltro rojo, típicos de cualquier sala de conferencias. Pero cuando se abrieron las puertas, todos entraron tranquilamente, sin formar nada de jaleo, pasando a sus posiciones para poder pasar el resto de la charla allí dentro. escuchándolo todo. Todos dijeron cosas interesantes, muy acertadas. La charla duró casi un par de horas, desde algo más tarde de las siete hasta las 9 en punto, casi. Primero un pequeño monólogo por parte de los conferenciantes, con el objetivo de despertar en los jóvenes esa conciencia política que dicen que hemos perdido con la estabilidad de la democracia, invitando a ejercer nuestro derecho al voto argumentando que en nosotros está el futuro de este país y cosas por el estilo. Pero después se pasó a la ronda de preguntas, que ellos mismos debían contestar... Muy interesante todo, sí.

Al final, yo creo, que todos nos alegramos un poquito de haber ido. Estuvo genial

Si estas dispuesto a hacer un buen corte de mangas
a quien te ordene conquistar aquella playa,
tender un puente, acorralar a algún vecino
en el supuesto que atacara el enemigo

(Y de fondo: Todo es pena, de Carmen París)

Hay veces que me siento mal, y es que hoy he descubierto a una niñita del barrio que me pone mucho... No sé, es una niña de 14-15 años, una niña. Una chiquilla que apenas está empezando a ser una mujer. Evidentemente no es que sea una obsesión gigantesca, pero sí que cuando la veo pasar, me gusta fijarme en ella, verla por ahí andar. Hoy, por ejemplo, la he visto volver del colegio, con el uniforme, estaba monísima (por no decir potentísima)... Y cuando me paro, me siento mal. Yo, un chaval ya de 20 años echándole el ojo a una niñita de 14 ó 15... Eso es que me estoy volviendo un viejo verde, Marx mío.

Dentro de un rato salgo camino de casa de Irenuca... Menos mal, porque es que si no llega a ser porque tiene la pierna jodida, no sé absolutamente nada de ella, me podría morir esperando para saber algo de ella. Pero bueno, esas cosas ya se saben, que uno se va, hace nuevas amistades y, probablemente, terminas pasando un poquito de las que tenías antes. Pero bueno, la voy a ver hoy después de... ¿dos meses sin verla? Espero que todo vaya bien, que no haya contratiempos... Por el resto, la cosa no va mal, evidentemente podría ir mejor pero también podría ir mucho peor. En lo que a mí respecta, bien. Pero no sé, me da un poquillo de pena que Gon se vaya, no por nada, sino por Sara, porque sé que ella sí que lo va a echar de menos (NO!!! Si te parece...). Pero bueno, nadie lo olbiga a irse, es él el que quiere, y si así lo desea, seguro que le va bien, yo se lo espero. Además, todavía queda un rato para que eso pase, que no se va mañana...

Bueno, tampoco tengo grandes cosas que contar, mi vida no es nada apasionante, pero es que tampoco tengo ganas de pensar, quizá tenga demasiado sueño para eso... Ya nos veremos si acaso más tarde

Hoy no tengo ganas de cambiar el rumbo
no tengo fuerza pa´ subirme al mundo
hoy me quedo donde estés
tejiéndonos la piel con cosas del querer

(Y de fondo: Todo es pena, de Carmen París)

Hoy he sentido que todos los vellos de mi nuca se erizaban al unísono... ¿Que por qué? Pues porque Mer me ha llamado durante el concierto de Ismael Serrano en Granada. Yo, para qué engañarnos, sabiendo que tenía dinerito en el móvil y conociéndola (porque le dura el saldo menos dos), pues sospechaba que me llamaría, pero mucho más adelante en la noche. Yo iba en el autobús, que venía de la tetería, de haber ido para allá con Marian Granadina, cuando se suponía que iba a ir más gente. Escuché el tono especial que le tengo puesto y pensé Ahí está. Lo cogí y realmente no sabía que canción era... Estuve unos segundos escuchando atentamente, pero los coches que pasaban cerca de la parada y el propio autobús no me dejaban escucharlo bien. Pero de pronto escucho y estudiantes con flequillo... y una fuerte emoción me asaltó. Papá, Cuéntame Otra Vez estaba escuchándose en directo al otro lado del teléfono... Y resultaba que yo estaba ahí, en el concierto de Ismael, mi pensamiento estaba allí. Y sin darme cuenta, me vi cantando a toda voz la canción por mitad de la calle, como si yo estuviese allí, con las lágrimas saltadas, sintiendo cada subida, cada gallo como si me encontrase sentado en una de esas butacas que estaban frente al genio... No puedes hacerte la idea de cómo me dejó la llamada, lleno de felicidad, de vida, de orgullo, de... De millones de emociones que serían imposibles describir aquí. Así que este post se lo quiero dedicar a ella, a Mer, que consiguió arrancarme más de una sonrisa mientras caminaba solo por mi calle, haciéndome sentir como uno de los hombres más felices de La Tierra en ese momento... Muchas gracias, darling.

Queda lejos aquel mayo, queda lejos Saint Denis,
que lejos queda Jean Paul Sartre, muy lejos aquel París,
sin embargo a veces pienso que al final todo dio igual:
las ostias siguen cayendo sobre quien habla de más.

Y siguen los mismos muertos podridos de crueldad.
Antes morían en Bosnia los que ahora mueren en Bagdad.
Antes morían en Bosnia los que ahora mueren en Bagdad.
Antes morían en Bosnia los que ahora mueren en Bagdad.

(Y de fondo: Asturias, de Víctor Manuel, el grande)

Realmente no sé como se puede echar de menos algo que nunca has tenido ni tan sólo por unas semanas... Cómo puedo añorar pasar las tardes andando por el paseo marítimo, viendo a los viejos contar historias de cuando estaban en la guerra y a los más pequeños peleándose por un balón de plástico rojo o verde, escuchar el rumor suave del mar, de las olas, cuando está en calma o cuando se enfada... sentir una lluvia fina mientras que veo a cinco o seis locos corriendo por la arena, con los pantalones subidos, con los zapatos sobre una roca negra, dejando que el agua fría del mar pasa por entre los dedos, les deje esa sansación tan placentera por entre sus dedos y se vuelva hacia atrás en busca de un nuevo impulso que le permita llegar de nuevo a sus tobillos. Poder salir a media tarde, a dar un paseo por todo lo largo de la costa, esperando simplemente la puesta de sol, con una buena compañía... Cómo puedes sentir que te faltan esos momentos cuando jamás los tuviste. Es por eso que este post lo quiero dedicar a todos aquellos que, como yo, añoren ese olor a salitre por su ciudad y ese sentimiento que el mar produce en nosotros.

Llévame a ver salir el sol
desde todos los portales de la luna
Llévame al puerto y al malecón
cuando el cielo se nos llene de gaviotas

Alumbrando las calles oscuras
todas las estrellas que hoy durmieron solas
(desde el rompeolas me acuerdo de ti)
Vuelo controlado, colgado del palo
de las banderolas

Y ahora ya no puedo prestarte mi abrigo
ni quitarte la ropa, ni sudar contigo
ni perder la calma, ni decirte las cosas
que nunca te he dicho

Ahora ya no puedo prestarte mis alas
ni subirte la falda, ni cogerte con vicio
Ahora da lo mismo reírse de todo
que llorar por nada

Llévame a ver salir el sol
cuando enrede los cabellos en tu nuca
Llévame al puerto de náufragos
y a los muelles que no escuchan tus preguntas

Desatando pañuelos de bruma
hace algunas horas que perdí la suma
(desde el rompeolas me alejo de ti)

Vuelo equivocado, tu voz es el viento
que rompe las olas

Y ahora ya no puedo prestarte mi abrigo
ni quitarte la ropa, ni sudar contigo
ni perder la calma, ni decirte las cosas
que nunca te he dicho

Ahora ya no puedo prestarte mis alas
ni subirte la falda, ni cogerte con vicio
Ahora da lo mismo reírse de todo
que llorar por nada

Y ahora ya no puedo prestarte mi abrigo
ni quitarte la ropa, ni sudar contigo
ni perder la calma, ni decirte las cosas
que nunca te he dicho

Ahora ya no puedo prestarte mis alas
ni subirte la falda, ni cogerte con vicio
Ahora da lo mismo reírse de todo
que llorar por nada..

(De fondo: Nostalgias, un tango de mi bien amado Carlos Gardel... Cada día amo más los tangos)

Creo que estos dos días pasados son de los dos mejores que he vivido de este nuevo año 2004, sobre todo desde que volví de Tennessee. Primero el jueves, un día de muchas actividades y alguna que otra sorpresa para más de un@ (¿verdad, Ter?). Pero bueno, me lo pasé genial. No es que bebiese muchísimo (4 vodkas con manzana y un Bacardi Breezer... Bueno, la verdad es que de la cantidad de malibú que le mangue a Inma de su copa, creo que podría decirse que me tomé uno yo solo... xD). Pero lo mejor, por supuesto, es eso de poder estar en la calle, riéndote de cualquier cosa que pasa, con tus amigos, cagándola muchísimo, inventándote nuevos deseos (Por una vida plena de actividad sexual, amorosa y orgásmica... Jajaja), riéndote de chistes que en cualquier otra situación no despegarías los labios siquiera... Y después discoteca, que anda que no la cogí yo con ganas... Necesitaba poder moverme libremente, bailotear toda la noche, estar toda la puta noche sin parar de moverte... Qué bien. Y el viernes, también fue genial... Bueno, en una forma diferente, por supuesto. Fue un día mucho más tranquilo. Me pasé por mi instituto, estuve una horilla más o menos yendo para arriba y para abajo saludando a los pocos profesores conocidos que aún quedan allí y que, además, me caigan bien. Pero lo mejor fue, sin duda, comer en mi tan amado "Beatriz" (léase "IES Beatriz De Suabia")... Fue llegar allí y que nos recibiera "Sebas" y me sentí como cuando llegábamos en 4ºESO allí, porque nos habíamos quedado para cagarla (porque por aquellass épocas no nos quedábamos todos juntos con algún objetivo en concreto). Y allí, yo pedí ese tan ansiado chipichurrasco (cuando lo hice, me sentí un poco mejor... ya he eliminado una de esas cosas que tenía que hacer para después de los exámenes :P), nos dieron una jarra de agua con cinco vasos y nos pusimos a comer. ¡Qué guay fue todo! No paramos de hablar, de arreglar el mundo sentados en una mesa de una cafetería de insituto, allí desde las tres menos algo hasta casi las siete... (con la incorporación de Andrés a no sé qué hora...) Fue idóneo, realmente. Ya tenía ganas de echar un buen rato simplemente cagándola, sin hacer nada en concreto, con la única compañía de mis amigos y un par de paquete de pipas. Realmente idóneo.
Y ahora, simplemente, a pasar el día sabático (como todos los de este curso :P), a leer Son de mar, a ver televisión, a ver la peli de esta noche, a cantar en mi cuarto a toda voz, con mi carpetita de letras (como bien dije hace unos cuantos de posts) y, simplemente, a cagarla... Porque la libertad ya duerme conmigo en mi misma cama...


Libre, como el sol cuando amanece, yo soy libre como el mar. Libre, como el ave que escapó de su prisión y puede al fin volar. Libre, como el viento que recoge mi lamento y mi pesar, camino sin cesar detras de la verdad,y sabré lo que es al fin la libertad.

(De fondo: Parece Mentira, de Ella Baila Sola)

Una vez más, comienzo diciendo que hace mil años que no paso por aquí dejando huella de ello. Pero bueno, ahora mismo acabo de decidir que de hoy no pasaba. Y es que tener el ano tan sumamente dilatado no es nada aconsejable para nadie. Estoy que no puedo estar sentado más de dos horas seguidas estudiando. Eso es lo peor de todo. Que a lo mejor estoy aquí todo el tiempo encerrado, pero cada par de horas necesito cagarla, necesito un kis kas.

Hoy estoy mucho más contento. Ya tengo un GRAN plan para después de los exámenes (bueno, acabo el jueves y el plan es para el lunes por la mañana, ?pero es o no después?): ver Crossroads y jugar todo el tiempo al PCFútbol 2001... ?Qué emoción!... Es que es lo mejor, cada vez que lo pienso... Qué guay... Y es que tengo millones de planes para esos días después de los exámenes: ir a La Creperi, salir de marcha, pasar mucho mucho tiempo con mis amigos, cagarla, cantar, bailar... millones de cosas... Y es que como bien dijo mi amigo Bartleby, la probabilidad de que se cumplan todos esos propósitos que te propones mientras estás de exámenes es inversamente proporcional a la convicción con los que te los propongas... Así pues, no me preocupo por decir que en el segundo cuatrimestre me voy a enmendar, que ya me vale, que me van a volver a meter toda la chusca si me dejo ir como lo he hecho en este... Puedo echarle la culpa a América, a NY, a Franklin, a los días de ocio que he tenido por aquellos lares... Pero es que no los cambiaría por unas navidades aquí estudiando, aunque supiese que lo iba a aprobar todo... Quizá no vuelva a tener la oportunidad de ir para allá en... ?cien años? Y, realmente, ha merecido la pena; por todo: por Nueva York, por Franklin (:P)... Puff, por cientos de cosas... Y ahora en la lejanía lo aprecio más aún. Me quedo con América (mejor que con la ESI)

Bueno, relamente me voy a ir ya, a ver si no me da un cortocircuito y consigo empaparme de todo

Start spreading the news, I'm leaving today, I want to be a part of it, New York, New York... These vagabond shoes are longing to stray and make a brand new start of it, New York, New York